Letras de Ojos más que ojos

REVOLCÓN DE ARENA Y AGUA
La misma sábana blanca nace ahora
en la enormísima calma.
Ronroneamos igual que a solas,
la isla casi callada.
Hace tan sólo un segundo y ya muero de nostalgia,
por lo que acaba de pasar.
Pero también deseo ver los mundos,
nieve, trenes, beduínos.
Ojalá en mi isla hubiera un pantano,
como el que vi en un documental.
Si al menos conociera dos mares,
¿es el viento siempre un vendaval?
Igual que en el revolcón de arena y agua, ola y burbujas,
una mano me cogió: era un clavo al rojo
y yo lo agarré.
¿Será la lluvia siempre de barro?,
te pregunté, y respondiste no.
¿Te ayuda alguien si lo necesitas?,
me contestó tu silencio.
Y no es todo tan bonito ni está tan embarrado,
¿aún te apetece irte?
Creo que sí que quiero
pero hay que aserrar tantas sogas como me atan.
Ojalá en mi isla todo se quede tal y como lo recuerdo.
Nadando en la barrera coralina
fue como ahora:
una ola nos hundió, todo era miedo y furia.
Cuando consigo olvidar todos mis sueños,
subiendo, huyendo o volviendo,
ruge un avión,
todo es miedo y confusión.

CUBO'S DISCOTECA
Al salir un día la expedición,
como otras veces, nuestras motos navegaban solas.
En camino vimos la tremenda áea de servicio
con una especie de ángeles feos
en un monumento.
Cubo's Discoteca,
camino de la noche larga y agitada.
Cubo's Discoteca
la cuna y la tumba en una sola sala.
Al llegar la gente en la puerta duda si pasar.
Fuera hace sol, demasiado sol.
Me desabroché el mono de cuero y me quité el casco,
y con mi mirada le comí la moral al portero.
Cómo era el guiri de la cabina, siempre igual:
conozco, no conozco.
Sí, pero en cuanto él nos veía entrar,
la basura allí no se oía más,
y la luz se hacía en Cubo's
y enloquecíamos (enloquecíamos).